Una vivencia personal del histórico tratado en ONU que prohíbe armas nucleares

El pasado viernes 7 de julio, un joven uruguayo tuvo la oportunidad de ser testigo y vivenciar de primera mano el histórico acuerdo, en el cual 122 estados de las Naciones Unidas adoptaron en Nueva York prohibir la fabricación, posesión y uso de armamento nuclear bajo cualquier circunstancia, marcando el camino hacia su completa destrucción y eliminación.

Miembro de la Iglesia Metodista en el Uruguay, y delegado de la Comisión de Asuntos Internacionales del Consejo Mundial de Iglesias, el Ing. Nicolás Sosa viajó a Nueva York y participó en la última semana de las negociaciones, como parte de la representación de la sociedad civil.

“Ayer la comunidad internacional dijo ‘basta’ al vacío legal que nos somete a estas amenazas, a través de una votación con mayoría abrumadora” comentó Sosa. “Dada la enorme mayoría de países firmantes, el tratado pone una gran presión sobre todo aquel estado que quede al margen. Se espera que esta presión contribuya a acelerar el proceso de desarme” agregó.

Las Iglesias miembro del Consejo Mundial de Iglesias están entre los muchos actores de la sociedad civil que han aunado esfuerzos durante años en el trabajo conjunto con los gobiernos de los estados parte para lograr este histórico tratado.

Entre los estados que han apoyado esta iniciativa se encuentra Uruguay, que además de apoyar la adopción del tratado lo ha puesto sobre la mesa en las recientes discusiones del Consejo de Seguridad sobre las demostraciones bélicas de Corea del Norte.

Ver: Relato del histórico tratado para la prohibición de armas nucleares – Por Nicolás Sosa

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